Ajoblanco casero, receta de la tradicional sopa de almendras
Disfruta de esta deliciosa receta de ajoblanco casero, una tradicional sopa de almendras ¡rica, cremosa y refrescante! Preparada con almendras tostadas, ajo, pan y vinagre, esta sopa es un plato perfecto para combatir el calor del verano.
Por qué te enamorarás de esta receta de Ajoblanco
- Sabor auténticamente andaluz - Descubrirás el gusto tradicional del sur de España con cada cucharada. El equilibrio perfecto entre almendras y ajo te transportará directamente a Andalucía.
- Ideal para el verano - Fresco y fácil de servir frío, este ajoblanco es el aliado perfecto para tus comidas estivales. Además, es una manera original de sorprender a tus comensales con algo diferente a las típicas gazpachos y salmorejos.
- Saludable y nutritivo - No solo es delicioso, sino que también te aporta una dosis saludable de nutrientes. Las almendras son una fuente excelente de vitaminas y minerales, ¡ideal para cuidarte disfrutando!
Ingredientes necesarios
¡Vamos a ver qué ingredientes necesitas para preparar este delicioso ajoblanco! Los protagonistas son: almendras, miga de pan, ajo, aceite de oliva, vinagre y agua fría.
- Almendras - Yo prefiero tostarlas ligeramente para potenciar su sabor, pero si estás apurado, también puedes usarlas crudas.
- Miga de pan - Utiliza pan sin corteza, ya sea blanco o integral. En mi caso, siempre tengo pan duro a mano para reciclarlo en recetas como esta.
- Ajo - El ajo le da un toque especial a este plato. A mí me encanta el sabor, así que suelo añadir dos dientes, pero tú puedes ajustarlo a tu gusto.
- Aceite de oliva - Es un ingrediente esencial en la cocina española. Utiliza aceite de oliva virgen extra para obtener el mejor sabor.
- Vinagre - Puedes usar vinagre de Jerez o de manzana, lo que tengas a mano. El vinagre le da un toque ácido que combina perfectamente con el sabor de las almendras.
- Agua fría - Utiliza agua fría para facilitar la emulsión de los ingredientes y conseguir una textura más cremosa.
Preparación de la receta
¡Vamos a por la preparación de esta deliciosa y refrescante sopa de almendras! Lo primero que necesitas hacer es moler las almendras y la miga de pan. Puedes utilizar un mortero o un robot de cocina, lo que tengas a mano. Una vez que tengas una mezcla fina, es hora de añadir los demás ingredientes.
A continuación, incorpora el ajo, el aceite de oliva, el vinagre y el agua fría. Mezcla todo bien hasta que esté integrado. Ahora viene la parte más importante: ¡batir hasta conseguir una textura suave y homogénea!
Presentación y acompañamientos
¡Ya casi lo tenemos! Ahora, hablemos sobre cómo presentar este delicioso ajoblanco y qué acompañamientos puedes añadir para hacerlo aún más especial.
Recuerdo cuando mi abuela me enseñó a preparar ajoblanco por primera vez. Siempre decía: "El secreto está en la presentación". Y tenía razón. Un bonito plato con un montón de uvas blancas por encima y un chorrito de aceite de oliva virgen extra hará que este plato sea el centro de atención en cualquier reunión.
Además, si quieres darle un toque más festivo, puedes añadir unas hojas de perejil fresco por encima. ¡O incluso unas lascas de jamón serrano!
En cuanto a los acompañamientos, el ajoblanco es perfecto con unos trozos de pan casero o una ensalada verde fresca. También puedes servirlo junto a unas rodajas de melón para un contraste de sabores delicioso.
Receta
Ajoblanco casero
Tiempo de preparación: 15 minutos
Una refrescante sopa de almendras típica de la gastronomía andaluza, lista en solo 15 minutos.
Ingredientes
- 125 g de almendras crudas
- 100 g de miga de pan (sin corteza)
- 2 dientes de ajo
- 125 ml de aceite de oliva virgen extra
- 2 cucharadas de vinagre de Jerez
- 500 ml de agua fría
- Sal al gusto
Instrucciones paso a paso
- Comienza moliendo las almendras crudas junto con la miga de pan en un procesador de alimentos hasta obtener una textura fina y homogénea.
- Agrega los dientes de ajo pelados y continúa procesando hasta que estén bien integrados.
- Incorpora el aceite de oliva virgen extra, el vinagre de Jerez y la sal al gusto, y sigue mezclando hasta que todos los ingredientes estén bien combinados.
- Añade el agua fría poco a poco, batiendo continuamente hasta conseguir una textura suave y cremosa.
- Pasa la mezcla por un colador para eliminar cualquier grumo y obtener una sopa fina y sedosa.
- Reserva en la nevera hasta el momento de servir para que esté bien fría.
Notas:
- Puedes acompañar el ajoblanco con uvas blancas, trocitos de jamón serrano o melón para darle un toque de contraste y frescura.
- Si lo prefieres, puedes sustituir el vinagre de Jerez por vinagre de manzana o incluso zumo de limón para darle un sabor más suave.
- El ajoblanco se puede conservar en la nevera hasta 2 días en un recipiente hermético.